INFORME ROJO: Mónica Robles: repudio bien ganado

  • Revientan foro sobre matrimonio igualitario y estalla contra el alcalde Carranza  

Por: Mussio Cárdenas Arellano

Una hora de alarido: el grito de los conservadores, el “no” que desdeña el matrimonio igualitario, el desfase verbal, la ira, la mofa, el reto, repudio a granel hasta reventar el foro. Y Mónica Robles tiene que huir.

Petrificada, la diputada por Morena escucha el clamor de la turba, la masa sin control, la protesta que transita del rechazo a la reforma legal, al precepto que se ampara en la no discriminación, hasta centrarse en su persona, el reclamo del que increpa —“no nos representas”—, el adjetivo que provoca —“traidores, mentirosos”—, el llamado a renunciar.

Azorada, Mónica Robles, a su lado Amado Cruz Malpica y el diputado federal Sergio Gutiérrez Luna, sigue con la mirada al del megáfono, al que agita el brazo, al que levanta y aprieta el puño, a decenas que portan cartulinas con leyendas de repulsa a la legalización de los matrimonios entre personas del mismo sexo.

“Ponte a trabajar en seguridad”, le gritan a coro. “Fuera, fuera, fuera”, demandan mientras mueven el brazo de un lado al otro. “Que renuncie, que renuncie”, exigen sin parar. “No a la reforma”, expresan una y otra vez.

Y Mónica Robles con una sonrisa burlona que al paso de los minutos mutaría a expresión de incredulidad, la angustia que transfigura el rostro, la impotencia en un escenario que la masacró.

Inundan la Sala de Cabildo de Coatzacoalcos decenas de manifestantes, este lunes 20, y revientan el foro que sería plataforma a sus ansias de poder, el arranque hacia la alcaldía del tercer municipio de Veracruz, la enfermiza obsesión del Clan de la Succión.

Vejada y hecha trizas, quiso hablar para imponer la línea a seguir. Quiso, porque en un instante la arrolló la avalancha de reclamos, la protesta airada, los dardos de ira, la descalificación a su condición de diputada por Morena —“eres plurinominal, no nos representas”—, las voces que se multiplicaban y nada pudo argumentar.

Aguantó cuanto pudo. Se dio tiempo para el desplante. Ordenaba captar rostros y palabras de aquellos que luego diría eran amenazas.

Y el fracaso la destrozó.

No salió por la puerta grande, como las reinas o las divas, ni como celebridad. Tomó un atajo por una salida lateral, como el ladrón que se aleja de la luz, entre mofas y risas, entre improperios y reproches, y el agrio sabor del foro que no se llegó a realizar. Y sus detractores partieron con el sentimiento de haberla reventado y cancelado el sueño de asaltar el poder.

Minutos después, el veneno, que es lo suyo, entró en acción. Frente a la prensa, Mónica Robles de Hillman fustiga al alcalde de Coatzacoalcos, Víctor Manuel Carranza Rosaldo.

“Me enteré hoy al llegar que no estaba el alcalde, que no estaba ninguna autoridad y ni siquiera la titular del Instituto Municipal de las Mujeres, sino una joven, pobre, que hace rato le dijeron.

“Lamento la ausencia del alcalde, el ingeniero Víctor Manuel Carranza, que me había confirmado personalmente y la ausencia de autoridades de primer nivel en el ayuntamiento explica el por qué no se pudo haber llevado a cabo esto.

“Yo lo que expreso es eso, ustedes lo vieron, esta ausencia, la autoridad tenía la obligación de garantizar que cualquier evento se pueda llevar a cabo en forma armoniosa, no fue así y creo es importante entender que cualquier autoridad debe gobernar para todos los ciudadanos más allá de cuáles son nuestras propias creencias”.

A los que la reventaron les llama intolerantes, manipulados.

“Yo escuchaba a una señora que de repente me dijo: es que ustedes quieren imponer en nuestros hijos, y me decía, yo respeto y señaló a un compañero de un colectivo de la diversidad sexual, ellos pueden hacer lo que quieran pero por qué quieren obligar a nuestros hijos. Eso nos dice más que ignorancia y manipulación, por supuesto que esta reforma no obliga a nada”.

Se dice amenazada:

“Incluso, hubo alguno de ello que nos dijo yo los voy a seguir en todo el sur y todo el estado. Sí hemos recibido amenazas directas, en redes sociales particularmente y bueno lo de hoy no deja de ser una amenaza”.

Luego, en redes sociales, profundiza el reclamo:

“Hoy el alcalde Víctor Manuel Carranza demostró con su ausencia, su falta de compromiso con los derechos de las mujeres, de las niñas y los niños, y de todas las familias a las que se supone representa y debe proteger.

“Hoy vi, de primera mano, la manipulación e intolerancia de quienes, ante la falta de argumentos, recurren a la violencia. Dejarme hablar, permitir que la gente se forme un criterio informado, me queda claro, les representa descubrir las mentiras y prejuicios que sustentan su postura.

“Cuánto dolor habrá en sus vidas para ver como una amenaza a otro ser humano, tan solo porque vive una orientación sexual diferente. Una sociedad que discrimina, que humilla y denigra, se aleja irremediablemente de las enseñanzas de Jesús, a quien tanto dicen venerar”.

Su historia pública es repugnante. Mónica Robles de Hillman encarna el desprecio, la soberbia, el desdén, el despojo de los bienes municipales para cristalizar la obsesión de poder… y de joder.

Una maniobra legaloide, un abuso de poder, dio pauta a que un parque público bajo control del DIF de Coatzacoalcos, en pleno deterioro, deliberadamente dejado en el olvido, se convirtiera en el proyecto ambiental que luego sería llamado Centro de Educación Ambiental Quetzalli.

Su militancia política se ancla en cinco ejes: PRI, PRD, Morena, Fidel Herrera y Javier Duarte. Según le sirvan al Clan de la Succión, los usa para tirarle zarpazos al poder y traducirlo en millones en convenios de publicidad para los medios del consorcio Imagen-Diario del Istmo, propiedad de su padre, José Pablo Robles Martínez.

Al PRI le debe la alcaldía de Coatzacoalcos, que su esposo Iván ejerció de forma deplorable.

Al PRD, una diputación federal plurinominal para su madre, Roselia Barajas Olea, hoy embajadora de México en Costa Rica, y posteriormente el nexo con Andrés Manuel López Obrador.

Al priismo la sumisión y enjuagues con el ex presidente municipal de Coatzacoalcos, Marcelo Montiel, que la llevó a ser diputada local bajo las siglas del PRI-Verde.

A Fidel Herrera, que le dio cobijo y protección, millones del erario en publicidad y eventos públicos.

A Javier Duarte, de quien fue tapadera, aprobando cuentas públicas y callando mientras el saqueo erosionaba las estructuras de gobierno y conducía a Veracruz a una debacle económica y a una catástrofe en seguridad, violencia, desaparecidos e impunidad.

Soberbia, engreída, descarga sus culpas en el alcalde que el Clan de la Succión acuerpó. Diario del Istmo hizo suyo a Víctor Carranza. Lo apuntaló. A cambio, extrae de las arcas de Tesorería casi 2 millones de pesos al mes que en nada ayudan para levantar la imagen vilipendiada del edil.

Hoy halla en Carranza al responsable de la ira popular. Lo increpa por su ausencia en el foro sobre la reforma que daría legalidad al matrimonio igualitario. El argumento es un ardid insostenible. El prestigio de Mónica Robles sólo existe en su imaginación. Es engaño y superchería. Salvo su corte de aduladores y lambiscones, el repudio de la sociedad era equiparable a un volcán que tarde o temprano habría de hacer erupción.

Hay ruptura en Morena. Mónica Robles no será alcaldesa de Coatzacoalcos así sea candidata. No garantiza votos, menos el triunfo. Contra ella se alinean desde Cuitláhuac García hasta Rocío Nahle, Víctor Carranza, Amado Cruz Malpica y sus huestes en el partido de López Obrador.

Mónica Robles, como los soberbios de Babel, construye su desgracia. Edifica un proyecto sin cimientos y avizora el derrumbe total.

Lo del foro es una lección. Sólo ella no advirtió el desenlace, el rechazo a la propuesta legal, la venganza de aquellos en los que hizo anidar rencor.

Cosecha el repudió que sembró.

mussioc2@gmail.com

mussiocardenas_arellano@hotmail.com

www.mussiocardenas.com

Be the first to comment on "INFORME ROJO: Mónica Robles: repudio bien ganado"

Leave a comment

Your email address will not be published.


*