Enrique Yasser Pompeyo
En la comunidad Pacho Viejo del municipio de Coatepec, los pobladores se encuentran molestos y preocupados.
Señalan a la empresa Bonafont de presuntamente extraer agua de esa zona sin la anuencia de los ciudadanos. La preocupación radica en que la comunidad se vaya a quedar en poco tiempo sin el vital líquido.
De acuerdo con habitantes, la empresa llegó a Coatepec en el año 2011, adquirió un terreno, levantó bardas y logró conectar su drenaje al de Pacho Viejo para realizar sus descargas de aguas residuales.
Los ciudadanos desconocen desde cuándo la empresa comenzó a sacar agua; solamente ven pasar camiones con el líquido.
También comentan que los representantes de Bonafont les han dicho que cuentan con la autorización de la Conagua; en los próximos días se reunirán con ellos y prevén que traerán consigo los permisos federales.
Sin embargo, los pobladores exigen la construcción de un pozo profundo para evitar que haya escasez.
La empresa Bonafont fue creada en 1992 por un grupo de inversionistas mexicanos y en 1995 fue comprada por el corporativo francés Danone.
El tema es complejo y delicado por las implicaciones ambientales que conlleva, de contaminación por el plástico pese a las campañas ecológicas, el despojo de los recursos naturales a la población, así como la privatización y comercialización.
Las autoridades, las organizaciones y los ciudadanos no deben perder de vista el caso de Pacho Viejo, pues al final, las trasnacionales son las únicas que ganan en un negocio de miles de millones de dólares anuales, a costa de la explotación del líquido y el impacto a las zonas donde se instalan.
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