MESA DE REDACCIÓN: En riesgo, combate a la corrupción

Enrique Yasser Pompeyo

El combate a la corrupción en el estado de Veracruz está en riesgo.

El Comité de Participación Ciudadana (CPC) del Sistema Estatal Anticorrupción (SEA) que representa el vínculo entre las autoridades del Estado encargadas de combatir la corrupción y los ciudadanos, se encuentra limitado para poder operar por falta de recursos.

Como lo informaron los medios de comunicación la semana pasada, desde el mes de enero de este año, los integrantes del CPC no han cobrado sus honorarios debido a que el recurso no ha sido liberado por la Secretaría de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN).

La falta de pago a los integrantes del Comité representa una ilegalidad, pues está estipulado en la Ley 348 del estado de Veracruz, además de que se incurre en una violación a sus derechos humanos, de acuerdo con la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

Pero, además, se genera un retraso en los trabajos que se realizan para combatir la corrupción en la entidad.

Me refiero particularmente a la aprobación de la Política Estatal Anticorrupción de Veracruz.

Si ya la pandemia mundial generada por el coronavirus COVID-19 obligó a posponer labores y por ende la sesión del Comité Coordinador que aprobaría el documento, el retraso de los recursos incide aún más.  

Por ello, el camino que le queda al CPC para poder obtener el recurso monetario es, como se ha mencionado, solicitar un amparo ante la Suprema Corte o presentar una denuncia  ante la Fiscalía del Estado por el incumplimiento de un deber legal (que se ve difícil que proceda por obvias razones).

La intención de debilitar económicamente al Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción sólo muestra el objetivo de controlar al organismo, de reducirlo, de ponerlo contra la pared.

El ejercicio arbitrario del poder y la inexistencia de organismos autónomos reales impedirán una efectiva alternancia en el poder.

Si los gobiernos de la llamada cuarta transformación han usado como bandera el combate a la corrupción, con estas acciones se observa todo lo contrario.

La concentración de poder y control representan un grave riesgo para todos los ciudadanos y, sobre todo, para la democracia.

Los veracruzanos aún están a tiempo de cambiarlo.

enriquepompeyo@hotmail.com