Habemus reformas / Lino Perea Flores

-Última parte-

La aprobación de las reformas estructurales trascienden todos los ámbitos del acontecer nacional, por lo que forman parte de los últimos acontecimientos económicos en México, de tal suerte  que comienzan a impactar el acontecer cotidiano de este país, en virtud de que la promulgación de las leyes que sustentan dichas reformas, vienen acompañadas de una serie de anuncios de programas y proyectos que parecen rebasar las expectativas señaladas inicialmente por la presente administración federal. Es a partir de la aprobación de las leyes secundarias en materia de telecomunicaciones y energía, que parece haberse desatado una ola de eventos de diversa índole tendientes a detonar el desarrollo de México, a juzgar por el anuncio de un gran número de propuestas de diverso calado, que en la gran mayoría de los casos tienden a ser espectaculares, porque auguran un gran cúmulo de inversiones, tanto públicas pero sobretodo privadas, que le darán un gran impulso a la economía de México.

Los datos duros iniciales parecen impresionantes, por un lado en materia de electricidad los planes son para que en los próximos quince años, el país reciba inversiones del orden de los 2 billones de pesos, lo que permitirá incrementar en poco más del cien por ciento, la capacidad instalada actual con 66,000 Megawatts adicionales de energía eléctrica; de este gran total de inversiones, se espera que el 75% provenga de la iniciativa privada, ya que desde la apertura del sector eléctrico en 1994, cuando se forma la Comisión Reguladora de Energía, el país ha recibido inversiones por 47,000 millones de dólares en inversiones privadas, que representan ese mismo porcentaje desde entonces.

Por lo pronto, el gobierno federal se apresta para habilitar la mayor parte de la reforma energética en materia de electricidad, por lo que en los próximos 16 meses se espera que las tarifas al consumo de este insumo energético tiendan a la baja; de esta manera, el director general de la Comisión Federal de Electricidad, Enrique Ochoa Reza, estableció que entre septiembre del 2014 y diciembre del 2016 la CFE logrará la reconversión de 7 plantas que utilizan combustóleo a gas, que con una capacidad de generación de energía eléctrica del 9% de la empresa, representan 4,560 Megawatts. De esta manera la aritmética resulta muy simple, ya que el combustóleo cuesta actualmente varias veces más que el gas que se importará de Texas, desde donde se importarán a finales de 2015, alrededor de 2,100 millones de pies cúbicos diarios para producir electricidad, el costo de producir la electricidad será menor y por ende su precio deberá ser menor o tender a la baja

El caso del sector petrolero no es menos espectacular, ya que por lo pronto la ayuda que recibirá Pemex es al menos de 33% su pasivo laboral, o sean cerca de 370,000 millones de pesos que pagarán los contribuyentes de este país. Por otro lado, el Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018, considera la construcción de 18 gasoductos nuevos, en virtud de lo que bajo la óptica de BBVA Bancomer, estima un crecimiento en la actividad industrial que significa que la demanda de gas natural en México se incrementará muy pronto en 5,000 millones de pies cúbicos, que derivará en un incremento de 28 Gigawatts de capacidad eléctrica, de aquí al 2027.

Desgraciadamente hoy Pemex invierte tres veces más que hace diez años para explorar y explotar los yacimientos petrolíferos de México, pero no obstante produce 25% menos de petróleo, lo que significa que los incrementos en los ingresos públicos debidos a la exportación de crudo, se dan en virtud de que los precios internacionales van al alza, por lo que el modelo de producción petrolero actual, ya resulta obsoleto y es una de las razones primordiales por lo que se ha aprobado la reforma energética de este país. Esperemos que nos beneficie a todos los mexicanos.

Comentarios:   perealino@yahoo.com.mx  (*)Maestro en Ciencias y Doctor en Economía por la London School of Economics and Political Science, de la Universidad de Brunel y la Universidad de Londres, Inglaterra.