EL ESPECTADOR: La crisis al interior de PEMEX

“Aquellos que tienen el privilegio de saber, tienen la obligación de actuar”

Albert Einstein


Por: Ángel Viveros

La crisis al interior de PEMEX está en su punto más alto, derivado del recorte a la calificación crediticia que analistas de Fitch Ratings anunciaron hace apenas unos días, los mercados financieros jamás preparados para este revés se depreciaban un 0.8 por ciento y los bonos de la empresa se precipitaron un 6.5 por ciento.

Los focos ámbar se habían encendido muchos, sí, muchos días antes en la meca mundial de los negocios de New York. Aquel fatídico día funcionarios de la otrora poderosa petrolera mexicana, hicieron el ridículo al presentar un inacabado y decepcionante “Plan de Negocios”, si evidenciarse querían, lo hicieron a lo grande y mostraron al mundo la desconexión que existe entre la nueva administración de PEMEX con los mercados.

Octavio Romero Oropeza, director general de la paraestatal y Roció Nahle García, Secretaria de Energía le dieron una embarcada al presidente de México Andrés Manuel López Obrador al mostrar falta de claridad en los programas de financiamiento.

Los analistas financieros y periódicos especializados fueron contundentes; los directivos mostraron desconocimiento de la compañía, no lograron impresionar.

De ahí el resultado de las rebajas en la calificación, el plan de negociación del presidente López Obrador fue llamarlos durante su conferencia de prensa “Hipócritas” “Cómplices”.

Los analistas de Fitch Ratings respondieron “consideramos que la alta injerencia del gobierno (AMLO) en sus finanzas, su consejo directivo y la designación de su titular, resulta excesivo”, fue la sentencia.

¿Es el intento de rescate financiero un auto sabotaje? Descalificar a Fitch resulta muy fácil, lo difícil será cambiar la percepción que ya se está generando en el extranjero, de que las cosas en México, válgame Dios, no van nada bien.

Allá afuera a los fifís, a los hombres de negocios, a los malditos capitalistas, no les importa la popularidad o aceptación del presidente, ni los cientos de marchas que se puedan organizar para que López Obrador no se sienta solo. ¿Lo entenderán en la 4ta transformación? ¿El PEMEX de Nahle está más fuerte que nunca?

Una cosa más y cerramos el tema. Después de la baja a la calificación de Petróleos Mexicanos por parte de Fitch Ratings, le seguirán las de Moody’s y la de Standard & Poor´s, con esto perderíamos el grado de inversión.

De regreso en la aldea al propósito de PEMEX y la corrupción.

Nos comentan lo que ocurre en Poza Rica entre los líderes sindicales petroleros y los empleados transitorios.

Estos empleados no tienen base, son por contrato y cuando este se les acaba, montan guardia en el sindicato para poder cazar al delegado y ver si puede otorgarles un contrato nuevo, que va desde un par de días hasta unos meses.

Los “Transitorios” son obligados a beneficiar a los magnánimos delegados con mochadas de dinero, regalos (botellas, ropa, autos, terrenos, comidas y borracheras) todo lo que los señores pidan y así de una manera más fácil o más rápida les dan a los transitorios los tan anhelados contratos.

Existen casos de trabajadores que pasan un porcentaje de su salario o quincena para no perder la continuidad de sus contratos.

En tierras petroleras, eso se sabe, pero es un tema del que los transitorios prefieren no hablar, por miedo a esos contratos. Esta es la herida purulenta de PEMEX, una empresa de clase mundial.

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angel_viveros@hotmail.com

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