El fenómeno de la informalidad, que representa entre 25 y 30% del Producto Interno Bruto en México, se agudizó en ocho entidades federativas durante los últimos cinco años, a pesar de que a nivel nacional se observó una reducción considerable, según un análisis de la consultoría aregional.
Se trata de los estados de Campeche, Chiapas, Durango, Veracruz, Colima, Guerrero, Distrito Federal y Estado de México, en los cuales el trabajo informal representa más de 50% de su población ocupada.
Campeche registró el mayor aumento. En el primer trimestre del 2010, 59.5% de su población trabajaba en una actividad no formal; un lustro después, en el primer trimestre de este 2015, la proporción aumentó a 62 por ciento. Es decir, avanzó 2.5 puntos porcentuales.
Ello obedeció al incremento en la ocupación unitaria y el “importante” aumento en la falta de acceso a contratos y servicios de salud para los trabajadores dependientes, de acuerdo con Flavia Rodríguez, directora de la firma.
En el listado le siguen Chiapas (71-72.9%), Durango (56.5-58.1%) y Veracruz (68-69.5 por ciento).
En Chiapas avanzó la ocupación unitaria y la falta de contabilidad y de contratos para los trabajadores en forma significativa; es decir, más personas trabajan por su cuenta o en empleo sin prestaciones.
En Durango hubo un deterioro importante en los servicios de salud, mientras que en Veracruz se registró una merma en derechos como prestaciones y contratos de trabajo, detalló la consultoría en su reporte de informalidad 2015.
Más abajo están Colima (61.5-62.3%), Guerrero (75.2-75.8%), DF (53.3-53.8%) y Estado de México (60.7-61.2 por ciento).
Sin embargo, se redujo
Durante su Tercer Informe de Gobierno, el presidente Enrique Peña Nieto destacó que la Tasa de Informalidad Laboral ha bajado 1.6 puntos porcentuales en lo que va de esta administración, de acuerdo con el Inegi.
Datos de aregional refieren que, a nivel nacional, la informalidad se redujo de 62.3 a 60% de la PEA en los últimos cinco años. En ese periodo, la población ocupada creció en 3.7 millones de personas, al pasar de 41.9 a 45.6 millones; de esos 3.7, 1.3 millones lo hizo en el mercado laboral informal.
“En suma, de los ocho estados donde aumentó la tasa de informalidad entre el 2010 y el 2015 destaca negativamente que Guerrero, Chiapas y Veracruz ya formaban parte, hace cinco años, del grupo de informalidad alta, por lo que el deterioro profundizó su déficit de empleo decente”, expresó Flavia Rodríguez.
Pero un total de 24 entidades logró reducir este fenómeno en el último lustro, destacando Baja California, Nuevo León, Coahuila, Chihuahua y Sonora.
La consultoría aregional considera a una persona ocupada como informal si presenta uno o varias de las siguientes características: no tiene establecimiento fijo, no tiene registros contables, tienen una remuneración menor a un salario mínimo, no tiene prestaciones básicas, no tiene contrato por escrito y no cuenta con acceso a servicios de salud.
De acuerdo con una encuesta de la Coparmex del DF, el desempleo, la falta de oportunidades, los bajos salarios que pagan las empresas y la situación económica por la que atraviesa la nación son las principales causas que orillan a la población a trabajar en el sector informal.
Mal trabajo
Datos al primer trimestre de 2015 del porcentaje de la población ocupada en la informalidad.
- Guerrero 75.8
- Oaxaca 74.3
- Hidalgo 73.7
- Tlaxcala 73.5
- Chiapas 72.9
- Puebla 72.3
- Michoacán 70.9
- Veracruz 69.5
- Nayarit 68.4
- Morelos 67.6
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