La intimidación o bullying lo define la ley como el comportamiento violento e intencional de un individuo o un grupo para hacerle daño a otro, que es recurrente e implica un desequilibrio de poder.
El hostigamiento puede manifestarse de distintas formas por medio de daño físico, verbal o psicológico. Para poder clasificar de hostigamiento a un incidente violento debe existir una diferencia de poder entre la víctima y el victimario, es decir, que uno debe tener cierta ventaja sobre el otro. Los métodos usados para intimidar a otros son regularmente Físicos: golpear, patear, propiciar una golpiza, empujar, escupir, dañar propiedad, o robar. Verbal: burlarse, poner sobrenombres, humillar verbal, intimidar verbal, amenazar, coartar, extorsionar, y la provocación mediante burlas sexista, o homofóbicas. Social: chismes, la propagación de rumores, situaciones vergonzosas, aislamiento o exclusión de un grupo, o hacer que otra persona asuma una culpa ajena y Electrónicas o (Cyberbullying) usar el Internet, el correo electrónico (e-mail) o mensajes de textos para amenazar, dañar, señalar, avergonzar, propagar rumores y/o develar secretos de otros, sin duda una problemática social muy actual que es recurrente en nuestras instituciones educativas, la que ha enlutado algunos hogares y que pudo ser evitada.
Hoy que en todo el país concluye ciclo escolar 2013-2014, les comparto una preocupación muy sentida en todos los hogares mexicanos, pues con gran alegría y proyectos piensa en el futuro de los hijos para que en algunos casos resulten muertos por esa situación de la violencia escolar. Sin duda que la violencia escolar no es nada nuevo, se ha hecho más visible desde que las instituciones escolares al igual que las ciudades han tenido un amplio crecimiento, lo que para muchos es un problema de máxima atención.
Lo primero que un padre debe conocer sobre la violencia entre niños, conocida en inglés como bullying, saber que no es cosa de niños, sino un problema grave de salud, especialmente en las escuelas, como lo indica la Organización Mundial de la Salud.Hoy más que nunca docentes, directivos, padres de familia y autoridades deben de conocer esta problemática, que a nivel mundial alcanza dimensiones magnas, lo que ha originado mayores conflictos entre la comunidad escolar; incluyendo suicidios, ejecuciones y obviamente la muerte de inocentes; que al no ser tratados con la profesionalización que se requiere agudiza la situación.
En la actualidad el problema de la violencia entre niños y jóvenes es tan grave en nuestro país que seguimos documentándonos y solicitaremos en su momento que nuestros legisladores pasen una ley, para tipificarlo como un delito y castigar aquellos niños o jóvenes que hostigan o intimidan a otros sin justificación alguna ¿Acaso algo justifica la violencia?
Aunque deseo advertir, que le estamos apostando a la prevención. Nadie en su sano juicio puede tratar eficazmente a un niño, un púber, un adolescente o un joven sino sabe primeramente que es esa etapa del ser humano. Superficialmente cualquiera puede reconocer a un niño y diferenciarlo de un adulto, el desarrollo y crecimiento de cada ser humano es un proceso difícil y complejo que transcurre a lo largo de todo el ciclo vital en distintas etapas evolutivas.
El desarrollo nunca es idéntico en personas diferentes; cada ciclo vital se convierte en un camino único e irrepetible. En las primeras etapas de ese camino, el niño no se encuentra solo, quienes lo rodean, quienes se encargan de su cuidado y de satisfacer sus necesidades tienen mucho que hacer y decir en la forma en que cada niño o niña realiza su travesía particular a lo largo de la infancia pero la situación se complica cuando tenemos que clasificarlos y saber los cambios que se están dando; entre los primeros que pasan de una etapa a otra de manera vertiginosa y muchas de ellas inadvertidas.
Por lo regular muchos sabemos que las etapas de nuestra vida está clasificada por algunos estudiosos de esta manera, así: Etapa pre-natal, infancia, niñez, pubertad, adolescencia, juventud, madurez, adultez, vejez y ancianidad; sin duda, aún antes de respirar esta atmósfera que estamos compartiendo tiene que ver con nuestro comportamiento y desarrollo en sociedad, lo que se manifiesta con mayor fijeza en la infancia; término amplio aplicado a los seres humanos que se encuentran en fases de desarrollo comprendidas entre el nacimiento y lapubertad caracterizada por 3 etapas que son: lactancia (bebé), primera infancia (infante) y segunda infancia o niñez en sí, siguiendo con la pubertad –adolescencia inicial-, es el nombre que se le da a la época en la que comienza uno a desarrollarse y cuando nuestro cuerpo pasa por cambios que nos cambian físicamente.
Estamos hablando de asuntos como las niñas desarrollan senos y los niños comenzando a parecer más como los mayores. Durante la pubertad el cuerpo crece con más rapidez que en ninguna otra época de la vida, excepto cuando éramos bebés.
La adolescencia es esencialmente una época de cambios. Es la etapa que marca el proceso de transformación del niño en adulto, es un período de transición que tiene características peculiares. Adolescencia es una etapa de descubrimiento de la propia identidad (identidad psicológica, identidad sexual…) así como de la de autonomía individual, para muchos estudiosos esta, dentro de la juventud llega hasta los 19 años, la juventud para muchos otros hasta los 30.
Las demás etapas para esta reflexión no las abordamos, pues ya existen programas, pero la situación de bullying manifestada entre las nuevas generaciones se da prácticamente en dos cuestiones; intimidación o hostigamiento; que se da propiamente en la infancia y adolescencia y por lo regular en las instituciones educativas, donde pasan la mayor parte del tiempo, pero con planes y programas fuera de contexto y de una realidad existente, por lógico que se seguirán dando estas situaciones, se deben implementar planes y programas que abarquen una educación integral, de calidad y basada en valores; no solamente de palabra, sino de hechos que es lo que seguimos esperando.
Las anteriores cuestiones basadas en nuestros conocimientos y experiencias por más de cuarenta años nos avalan, por ello seguiremos implementando programas complementarios y supletorios; basados en métodos específicos para docentes, padres de familia y alumnos con el propósito de evitar el tan mencionado “bullying”; pues todos debemos coadyuvar con las autoridades para abatir este mal de nuestros últimos años, los que han dejado malas experiencias
¡Estamos! alodi_13@hotmail.com
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